Un baño relajante

Akari paseaba por lalrededor de las termas. ´Había decidido venir por aquí dado que no conocía bien esta parte de la ciudad. El agua estaba limpia y clara y realmente se veía agradable. Miró alrededor, procurando que no hubiese nadie y se desnudó, metiendose en el agua. Ya dentro se soltó el cabello, sumergiendose hasta el cuello y dejando que flotara en el agua.

La joven oyó un ruido y se giró, vió que era una joven y por su tatuaje la identificó con sayuri-sama, la dueña de su okiya. Salió del agua, y se vistió, se acercó a la orilla cerca de Sayuri . Buenos días Sayuri-sama, ¿cómo está? Preguntó haciendo uan reverencia

La joven sonrió - Perdone Sayuri-sama, ¿sería mucho atrevimiento si me uniese a su baño? - preguntó con respeto

Akari se retiró un poco para desvestirse y se sumergió - el agua es agradable, ¿no cree,
Sayuri-sama? - Preguntó amablemente - Perdone mi comporamiento en el templo, a veces soy muy temperamental. - Se disculpó.

Gracias SAyuri-sama, es usted realmente amable con todas nosotras - le dijo sonriendo

¿Y usted no tiene sueños, Sayuri-sama?-preguntó aun sabiendo que era un atrevimiento

Francamente no - Dijo con sinceridad la chica. Su única meta había sido estar cn su hermana y lo había logrado - ¿Cuáles son sus sueños? - prguntó

Espero por mi bien que vuestro sueño se cumpla sayuri-sama - sonrió y reflexionó sobre lo qe decía de encontrar a una persona - Yo no aspiro a encontrar un amor, suelen ser ilusiones que se rompen cone lt iempo - DIjo recordando a sus padres

Quizá...-Suspiró - Y espero no incomodarla, mas, no ha encontrado usted a nadie a quién amar aun, Sayuri-sama? es usted hermosa y muchos hombres habrán puesto sus ojos en usted - Añadió tratando de sacarle algosobre su relacion con su hermana

Oh, ¿No le gustan los hombre Sayuri-sama? - Dijo fingiendo sorpresa -, y cuando la conoció, a esa persona importante... yo nunca la vi con nadie

Si, lo es, dado que nadie sospecha nada...-, Nadie, menos yo- pensó - Espero que algún día nos de una agradable noticia contándonoslo.

¿Debería saberlo? - Preguntó con tonto inocente - Si, es cierto, tengo interés, al fin y al cabo usted es la jefa de la Okiya.

Quizá, mas...¿quién soy yo afirmra algo que no he visto? - Se desentendió - Yo no sabré nada, si no se quiere que yo lo sepa. - rió - Puedo ser ciega, sorda y muda si es necesario.