Un regalo especial

Andre caminaba algo perdido entre la multitud, hace muy poco q vivia en el pais y se senti algo desorientado. Sin dua resaltaba por entre la multitud por su aspecto extranjero. No tenia ningun motivo preciso por el q estuviera alli, solo queria caminar un poco... De repente se encuentra a una joven(yukuhime) y se dirige hacia ella...

-disculpe.... podria decirme donde estoy? me he perdido....

La chica voltea al sentir que alguien le hablaba. De por si las Geishas y/o Maikos no deben hablar con cualquier persona , ni menos si son hombres desconocidos, ellas solo asienten o niegan con la cabeza o indican. Así pasó ahora con ella. Al escuchar a un hombre y al fijarse en su apariencia de extranjero la muchacha comprendió y reclinando un poco la cabeza pero sin dejar de mirarlo de vez en cuando indico con su abanico hacia un letrero en el cual estaba escrito el nombre de la calle.

-''cielos, a veces olvido las costumbres de este pais, en especial si se trata de mujeres"

Lee el nombre de la calle, q de por si apenas puede pronunciar, su japones no era endiviable, ni nada parecido a su amado italiano. Trataba de aprender, y a pocas semanas de vivir alli, lo domina a medias.

-Disculpe, senorita, se q sera un inconveniente, pero, podria decirme el nomvre de la calle, mi lectura de japones, es muy mala.... por favor,se lo agradeceria mucho.

-pues no tenia un lugar especifico donde ir, señorita. Pero ya q estoy en la calle principal, recuerdo q aqui sirven excelentes platillos tipicos de Japon, ya q estoy aqui, aprovechare.... podria recomendarme alguno?

Le habla sin mirarla, para mo incomodarla, miraba hacia el bullicio de la gente.

Yukihime subió la mirada y la petición del hombre la incomodaba algo en estos momentos, aun mas a ella, siendo una Maiko, que quizá alguien pudiera reconocerla y decirle a alguien de la okiya.
Sin embargo en algo a la chica no le importó y sin cmabiar su semblante, amablemente accedió a ser algo asi como su guía turistica en medio de la zona comercial.

-pues... algo tipico que quiza le guste? que es lo que prefiere o imagina?-

quizá lo del regalo podía dejarmo para un poco mas tarde.

-pues la verdad no se, aqui comen muy distinto q en mi pais, pero como te dije, me han recomendado los platillos de esta zona.

Analiza un momento su actitud, siempre se ha sorprendido con los comportamientos y costumbres de la cultura japonesa. Quiza pudiera aprender algo de ella.

-no se si esto es prudente, pero puedes acompañarme? seria grato tener a alguien al lado q sepa donde esta sin perderse.

Sin duda encontrarse con un turista que ahora tiene residencia permanente en Japón significaba que estuviera desorientado, sin saber de las costumbres y la cultura que aqui se vivia.

La joven asintió con la cabeza suavemente y un si asertivo muy despacio salio de ella -sigame por favor-

Yukihime caminaba algo mas adelante que él mirando hacia donde podía llevarlo, algún lugar que fuera de su agrado.
La multitud caminaba algo apresurada y congestionaba de vez en cuando el paseo de la calle. Yukihime ahí entre medio intentaba pidiendo permiso pasar, mientars notaba de vez en cuando y muy disimulada si el señor la seguía.
-con permiso...por favor...compermiso...disculpe...- se abria paso entre todos.

-[serio] detente un momento -olisquea el aire- q es ese agradable olor? huele como... a pescado, pero diferente...

Se detiene frente a un local bastante vistoso, Andre lo obserba con atencion, el olor provenia de alli.

-Señorita, me gustaria entrar alli... puedo?

Volteando donde el hombre se vuelve hacia él. Escuchando su sugerencia se asoma al lugar. Tenia variados platos: Sushi, ramen de distintos sabores e ingredientes, panes u bolitas de arroz, entre otros.

Se asoma mas de cerca quedando frente al mesón de servicio y mira el plato al cual el caballero se refería. Lo miró atenta y volteo a donde él -Sake Furay- dijo segura. Al parecer el hombre no entendia nada y eso se notaba en su rostro, ella rió levemente y lo aclaró -es sake furay, salmón frito apanado con acompañamiento, ese es el olor que salía-

-si, ese exactamente. Como se llame.... huele bien.... em.... ¿quieres acompañarme a comer, señorita? seria una forma de agradecerle su ayuda. Por favor, acepte.

Andre la mira con seguridad, esperando su respuesta. Mira despues hacia adentro del local.

-Insisto. Mas si no quiere, estara bien.

Una mujer lo atiende, el pide un sake furay,mal pronunciado, pero lo pidio. Le pregunto a la joven si queria algo y ella se niega con amabilidad, por lo q el no le replica. Debia esperar algunos minutos.

-[pausa] puedo saber tu nombre? es q ahora te debo un favor....

dejó de mover su abanico e inclinando levemente la cabeza con sus ojos suavemente cerrados se presentó -mi nombre es Yukihime Hiro señor-

Era común ese tipo de presentaciones aunque hoy en día las geishas de hoy eran algo mas atrevidas, mas perspicaces y sus presentaciones solían ser como las de cualquier mujer ante cualquier otra persona, sin embargo el respeto por parte de ella ante los demás se mantenía.
Permaneció así mientras el hombre solo la miraba escuchandola auqnue por ser también este tipo de mujeres no era reciproco al pedir la precentación del caballero u otro hombre a quien acompañaba.

-Permitame presentarme,entonces... mi nombre es Andre Rossi, oriundo de Florencia, Italia. Gusto en conocerle, Yukihime... y por favor, no me trate de señor, me hace sentir muy viejo, y creo no estarlo. A mis 27 años me considero joven...

Se pone comodo en su silla, mira con atencion a su acompañante.

-dime, yukuhime, ¿te interrumpo algo importante por hacerme compañia?

-es usted muy amable, aunque yo sea un extrano, yukuhime. Se lo agradezco. En mi pais las cosas eran distintas, muy distintas.

Llega el plato q habia pedido, despues de agradecer de la comida, lo come con satisfaccion.

-vaya,esto sabe increible, jamas habia probado nada asi. Su comida es muy curiosa.

-Si, aunque para serte sincero, extraño la comida de Italia, sus carnes y sus pastas...-se percata de algo- q es una oyika?

-pues... me gustaria.... suena interesante.

Sigue comiendo, hasta q se lo acaba todo. Aparta el plato.

-Si estuviera mas hambriento, me comeria unos 5 mas [rie] le agradezco su companoa, senorita Yukuhime

-mmm... tendra q probarlas, me gusta el picante.

Medita, se levanta, parece recordar algo...

-quiero devolverle el favor. Dejeme acompañarla a buscar el regalo q buscabas. No acepyto un no.

Titubeó un poco -pe...no, no se moleste...en..en serio Andre-san, no hace falta, no quiero hacerle perder si tiempo- dijo apresurada -lo que estaba haciendo puedes esperar...-
El joven parecia insistir y hasta de pie estaba. Se acercó el hombre que atendi y cobró lo respectivo, mientras tanto Yukihime pensó y también se puso en pie e hizo una pequeña reverencia a Andre

-se lo agradesco mucho joven Andre, es usted alguien muy amable-